viernes, 26 de febrero de 2010

TRUJILLISMO O NEOTRUJILLISMO.

El crimen no prescribe ni queda jamás impune". Juan Pablo Duarte. 

Las airadas protestas por la puesta en circulación del libro «Trujillo, mi Padre», escrito por "Angelita Trujillo", hija privilegiada del déspota, son muestras claras del rechazo a cualquier intento por atropellar la memoria histórica del pueblo dominicano.

Heridos en su dignidad por las ideas centrales de la obra y por las pretensiones de sectores oscuros de promover el trujillismo a pesar de la existencia de una ley que lo prohíbe se plantaron y rechazaron con valentía esa afrenta a la memoria de los mártires de la ignominiosa tiranía.

La Ley 58-80 de 1962 establece claramente que "Toda persona que alabe o exalte a los Trujillo o su régimen tiránico, en alta voz, o por medio de gritos, discursos, escritos públicos o epistolares, dibujos, impresos, grabados, pinturas o emblemas se considerará y juzgará como autor de delito contra la paz y la seguridad publicas y será castigada con prisión de diez días a un año o multa de diez a quinientos pesos or0 o con ambas penas a la vez", (artículo 1). 

Independientemente de los postulados constitucionales y los convenios sobre derechos humanos esta Ley sigue vigente, no ha sido derogada. Tampoco han sido investigado y sancionados los crímenes de la oprobiosa tiranía. Pero hasta el sentido común indica que en vez de venir a enaltecer el régimen deben ser requeridos para que rindan cuentas al pueblo dominicano por los abusos y atropellos que cometió la tiranía.

Un régimen instaurado sobre la sangre y el dolor de los quisqueyanos, sobre montones de cadáveres magullados por las torturas de los esbirros y el propio tirano. Un régimen impuesto a base de terror, represión, miedo y manipulación. Cualquier calificativo por fuerte que parezca queda corto ante las atrocidades cometidas por las huestes truijillistas. Así que para ellos no debe habar perdón en la sociedad dominicana y quienes pretendan reivindicar el oprobio padecido por los dominicanos, disfrazando el tigre con piel de oveja, se expone a correr la misma suerte.

Los huérfanos/as de la dictadura aún esperan que la sociedad dominicana del Siglo XXI no permita ningún halago o enaltecimiento a quienes se empeñan en maquillar y revivir aquella oprobiosa época. Ya han logrado suficiente asegurándose la impunidad, gracias a la complicidad de los sectores que se empeñan en rescatarlo y a la cobardía de quienes han podido pedir cuentas y no lo han hecho.

Como bien ha señalado el historiador Roberto Cassá: "Bajo el trujillato la mínima disidencia conllevaba muerte, tortura o exilio. El hecho de que todavía tengamos que afrontar este debate tiene una causa: Tras el ajusticiamiento del tirano no hubo una drástica solución de continuidad y no se ajustaron cuentas con los criminales materiales e intelectuales".

Ojalá que este libro no encuentre eco en la sociedad dominicana para no convertir en dinero limpio los planteamientos enaltecedores de Trujillo, que naturalmente hace su hija quien disfrutó a sus anchas del régimen que encabezó su familia en país. De todos modos, el libro circula porque hubo quienes se dispusieron a eliminar las trabas que impuso desde sus inicios la férrea tiranía. Los autores disfrutan de la libertad que le negaron al pueblo dominicano por mas de 30 años. 

La memoria y los recuerdos de las atrocidades de la tiranía son tan grandes que aún hoy provocan rabia e impotencia entre quienes padecieron la sanguinaria "Era de Los Trujillo". El Siglo XXI es y debe ser de luz y esperanza no de tinieblas y nubarrones. Es tiempo de superar el pasado sin olvidar sus lecciones dolorosas. Superar el neotrujillismo es un deber moral de los herederos de Luperón, Constanza, Maimón y Estero Hondo. Es una obligación rechazar cualquier intento de revivir la memoria del trujillato apostando a la desmemoria del pueblo.

Hoy transcurrido 49 años del descabezamiento del régimen oprobioso quedan heridas por curar y cuentas por cobrar a quienes le sirvieron de soporte e instrumento ideológico a la maquinaria represiva del trujillato. Esa deuda pendiente es difícil de cobrar pero el pueblo ya los juzgó y la sentencia es y será siempre.

 ¡Nunca, nunca más! 

martes, 16 de febrero de 2010

CAAMAÑO y CARACOLES.

"La libertad cuesta muy cara, y es necesario, o resignarse a vivir sin ella, o decidirse a comprarla por su precio". J. Martí.

Hoy se cumplen 41 años de la caída en combate y el posterior fusilamiento del expresidente de la República, coronel Francisco Alberto Caamaño. Su entrega, compromiso y gallardía se imponen al preludio del olvido. Acompañado de por tan sólo nuevo combatientes desafió a la poderosa dictadura balaguerista.

Físicamente se ha ido pero la grandeza de su ejemplo se agiganta con el paso del tiempo. Su dedo acusador señala a quienes pusilánimes prefirieron negar su presencia, antes que asumir con responsabilidad la presencia de Caamaño al frente de la expedición de Playa Caracoles.

Caracoles es una muestra del elevado sentido de compromiso del grupo que comandó el héroe que en abril de 1965 encabezó la lucha contra los enemigos de la democracia. Defendió con arrojo la soberanía nacional cuando el 28 de abril,los marines yanqui se apoderaron del control de las huestes golpistas y sembraron el terror en las calles de Santo Domingo.

Loor al héroe de abril de 1965 y mártir de febrero de 1973. Reverencia y respeto para la memoria de sus compañeros de Expedición. Los hombres de febrero en Caracoles trillan con decoro los escarpados caminos de la historia. Ellos la escribieron con el rojo de su sangre generosa en aras de la libertad de su pueblo.

Recordémosle con la canción compuesta por Ramón Leonardo que se ha hecho un hinmo al coronel y expresidente de la República Dominicana, quien fiel a sus principios cayó defendiendo el honor nacinal y la justicia social.

Caramba caramba
Francisco Alberto, caramba
Mi comandante te hiciste
Te hiciste el muerto en la sierra
Se lo creyeron, ¡qué bueno!
Francisco Alberto, ¡caramba!

Ellos contaron el cuento
Francisco Alberto
Y ellos no lo creyeron
Que tú te has ido, no es cierto
Tú estas viviendo en el pueblo
Francisco Alberto ¡caramba!

Te sembraste en las montañas
Francisco Alberto, ¡me alegro!
Y engañaste a los de arriba
Los generales y el miedo
Francisco Alberto, ¡me alegro!
Francisco Alberto, ¡caramba!

Media isla
En la zozobra del luto y de la sangre
Media isla
Y la presencia centenaria de los yanquis
Media isla
Media isla bañada de febrero en Caracoles

Francisco Alberto, Peña Jáquez, Galán
Claudio, Pérez Vargas, Hamlet, Payero Ulloa
Holguín Marte y Lalane

Dijeron que estabas muerto
Francisco Alberto, ¡caramba!
Y que en un sitio ignorado
Enterraron tu fusil
Francisco Alberto, y tu cuerpo
Francisco Alberto, ¡caramba!

Ellos contaron el cuento
Francisco Alberto
Y ellos no lo creyeron
Que tú te has ido no es cierto
Tú estas viviendo en el pueblo
Francisco Alberto, me alegro

Francisco Alberto
Mira tu pueblo
Hoy tu gesto es su alimento
Ya no hay miedo ni silencio
Y están siguiendo tu ejemplo
Francisco Alberto, ¡caramba!

Francisco Alberto…

miércoles, 3 de febrero de 2010

LA GUERRILLA DE CAAMAÑO

"Mientras no se castigue a los traidores como se debe; los buenos y verdaderos dominicanos serán siempre víctimas de sus maquinaciones. Juan Pablo Duarte.

Hoy se cumplen 37 años de la llegada al país de la expedición guerrillera comandada por el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, héroe nacional. Una vez concluida la Guerra Patria de 1965, Caamaño fue enviado como agregado militar, esta era una forma de alejarlo de los escenarios políticos del país.

Abandona las funciones de agregado militar y se radica en Cuba donde inicia la preparación del grupo de hombres que le acompañaría en la lucha por derrocar la dictadura ilustrada de Joaquín Balaguer, que se afianzaba a fuerza de garrote, macana, bayoneta, bombas, grandas, fusiles, machetes, cuchillos o accidentes simulados.

Para apoyarse en el país contaba con los Comandos de la Resistencia que encabezaba el aguerrido revolucionario Amaury Germán Aristy, quien le supliría hombres y recursos a través del Grupo denominado "Los Palmeros" y los Comités Camilo Torres (CORECATOS).

Caamaño desarrolla una intensa actividad para reclutar y preparar los expedicionarios que le acompañaría en su regreso a su amada Patria. Contó con amplias facilidades de las autoridades cubanas para desarrollar sus actividades. En un primer momento se reclutaron un contingente de más de 80 hombres pero al momento del desembarco el grupo se había reducido a sólo nueve.

Luego de varios intentos por convencer al liderazgo político del país para que apoyaran a los grupos de resistencias luchaban en las calles por no ser exterminados por las huestes aligerasteis, asesoradas por los USAmericanos, a través del Grupo de Asesoría y Asistencia Militar (MAAG).

El año de 1973 marcó el final de una larga espera para los hombres de Caamaño. Varias veces se había pospuesto la salida de Cuba. Concluido los preparativos y planeada la estrategia a seguir salieron el día 2 y llegaron a las costas dominicanas la madrugada del 3 para internarse en la zona montañosa e instalar un foco guerrillero. Playa Caracoles en la provincia de Azua fue la zona escogida para el desembarco.

Con 9 hombres y sin tener asegurado el respaldo de los principales líderes de la oposición (Peña Gómez, Juan Bosch), incluido las fuerzas de izquierda como el Partido Comunista Dominicano, el Movimiento Popular Dominicano.

Las fuerzas balagueristas y los cuerpos armados asumieron la determinación de barrer la resistencia de la posguerra y así lo hicieron. Miles de dirigentes revolucionarios y progresistas perdieron sus vidas. Dentro de ellos se incluyen los 5 integrantes de los Comandos de la Resistencias que cayeron el 12 de enero de 1972. En ese grupo calló Amaury Germán pieza clave del proyecto de Caamaño.

Esas pérdidas impactaron negativamente y debilitaron el apoyo al proyecto de Caamaño y su grupo. Muchos en el país negaron la presencia del Héroe de Abril en las montañas dominicanas. Varios son los acusados de traición. Se sabe que las fuerzas revolucionarias fueron diezmadas pero, aún así les faltó coraje para reivindicar ante el pueblo la presencia de la guerrilla.

Bajo una tenaz persecución de las Fuerzas Armadas, los 8 guerrilleros penetraron en las inhóspitas lomas de la Cordillera Central, bordeando a San José de Ocoa. Varios combates se efectuaron, muchos éstos han sido reseñados por los sobrevivientes de la expedición Hamlet Herman y Claudio Caamaño. Con poco apoyo del campesinado para sostenerse en las montañas y sin ninguna acción en las ciudades, toda la atención se concentró en el foco guerrillero hasta que finalmente fue extinguido.

Trece días después del desembarco el 16 de febrero, las Fuerzas Armadas anunciaron la muerte de Caamaño junto a dos de sus compañeros en el paraje Nizaíto, sección la Horma de San José de Ocoa. El contralmirante Ramón Emilio Jiménez hijo, Secretario de Estado de las Fuerzas Armadas, el mayor general Enríque Pérez y Pérez y el brigadier Juan René Beauchamps Javier, mostraron el cadáver de Caamaño a un reducido grupo de periodistas que fue traslado en helicóptero hasta el lugar donde se encontraba el cuerpo sin vida, y los de sus compañeros Heberto Lalane José y Alfredo Pérez Vargas, aunque las FF. AA informaron que Caamaño había muerto en combate, testimonios posteriores afirmaron que él fue fusilado, luego de ser apresado por tropas del Ejército Nacional que lo perseguían.

La herencia de la gesta que se inició un día como hoy, se mantiene perenne en la borrosa memoria del sufrido pueblo dominicano. Ese pueblo que vio en los días de la Guerra de Abril de 1965 en el coronel Caamaño el redentor del honor patriótico masillado por los traidores vestidos de héroes, quienes invitaron al imperio yanqui a invadir el territorio nacional.

La historia ha demostrado, que a pesar de la derrota militar, el fervor patriótico que acompañó a los revolucionarios estaba inspirado en los principios libertarios de Luperón, Francisco del Rosario Sánchez, Manolo Tavárez, Patria Mirabal y todos los que han caído defendiendo los ideales libertarios y de justicia social.

Ni siquiera los detractores y enemigos han podido minimizar las acciones de los expedicionarios. Grandes pasiones y hasta esperanzas despierta el hecho de recordar dicha acción. Unos dicen que el Coronel se inmoló otros que su acción fue acto desesperación. Lo cierto es que herido y apresado fue fusilado por sus verdugos, repitiendo el procedimiento aplicado al Ché Guevara en 1967 cuando cayó herido en selvas bolivianas.

Es oportuno, justo y necesario reconocer el valor y el sacrificio de quienes han entregado sus vidas defendiendo al pueblo dominicano. Caracoles y Caamaño entran a la historia como un intento más por superar el atraso político, económico, social y cultural de la sociedad dominicana. Una prueba incuestionable de patriotismo y entrega a la causa revolucionaria. "No hay noche que no amanezca ni plazo que no se cumpla".

Gloria a los caídos y reconocimiento a quienes aún permanecen entre los mortales. Repudio a quienes se empeñan en borrar de la historia una página tan gloriosa. Morir por la Patria es seguir viviendo dijo Martí. Así, esos hombres símbolos permanecerán y se eternizarán en la conciencia nacional. Sus elevados ideales siguen inconcluso.

lunes, 1 de febrero de 2010

NO ES CUESTIÓN DE ÑE, ÑE, ÑEEE…

Señores

El tema municipal, a pesar de lo que se ha debatido y de haberse creado un nuevo marco institucional, sigue al margen del debate político. A lo más que llega es a plantear demagógicamente cuestiones que a "ojos de buen cubero" son inalcanzables. La democracia municipal está sumida en atraso espantoso, no nos engañemos. Los partidos políticos como actores fundamentales andan divorciados de las necesidades de las comunidades.

El centralismo municipal está más acentuado que nunca. ¿Cómo puede hablarse de transformación municipal con sociedades manipuladas y desorientadas por las mafias partidarias que han secuestrado al sistema político dominicano? Habrá casos aislados y luces esperanzadoras, pero son muy escasas.

Los ayuntamientos dominicanos no resisten un examen institucional, a pesar de los esfuerzos intelectuales y los recursos invertidos. No respetan las leyes (Medio Ambiente, Acceso a la Información, PP, Cuotas femeninas, Contraloría, Planificación...etc.). No pasan la prueba.

Hay que replantear y relanzar el municipio dominicano si se quiere avanzar. Insistir en crearle una estructura moderna a una sociedad analfabeta políticamente hablando es como tirarle piedra a la luna y pegarle.

Se deben definir varias cuestiones para avanzar en el tema municipal:

1. Eliminar la reelección en más 2 períodos para el mismo cargo.

2. Impulsar la "independencia": el desarrollo de las organizaciones sociales locales.

3. Desarrollar acciones de ciudadanización de la política en el nivel municipal.

4. Promover las sanciones de las prácticas clientelares.

5. Exigir el cumplimiento de las normativas.

6. Promover una cultura cívica para y desde los municipios.

7. Promover la conformación de organizaciones políticas locales.

8. Incentivar y promover la demanda de información pública para transparentar la gestión local.

9. Impulsar la reorganización institucional de los ayuntamientos para superar el folklorismo administrativo.

10. Exigir un perfil mínimo para desempeñar las funciones de alcalde, alcaldesa, regidor, regidoras, directores/as y sus suplentes. Etc.

11. Aspirar a los cargos electivos. Como profesionales, como munícipes tenemos derechos y estoy seguro que alcanzaremos logros envidiables.

12. Seguir opinando para definir los horizontes de la municipalidad que nos merecemos como dominicanas y dominicanas comprometidos/as con el desarrollo sostenible del país.

Se pueden incluir varias cuestiones más, pero hay que colocar a la gente en el centro de la acción de los gobiernos locales si se quiere pasar de la manida retórica populista en que está inmerso ese importante "poder". No se le puede pedir al carnicero que perdone la vida del animal que sacrifica, pero tenemos que crear las condiciones para mejorar su trabajo.

Dejo a los demás completar el listado. Este FORO puede hacer grandes aportes y de hecho, estas discusiones son parte del mismo. El país agradecerá el legado de una verdadera institucionalidad local, propia del siglo XXI y nosotros dejaremos de lamentarnos y de halarnos los moños.

Los resultados de los próximos 6 años dirán si estamos avanzando, si seguimos estancados o si retrocedemos en los aspectos clave del proceso de institucionalización del municipio dominicano. La apuesta debe orientarse al logro de un ayuntamiento respetado, honorable y comprometido con el desarrollo de las comunidades que dirige. Las autoridades municipales tendrán que entenderlo o serán aisladas por las masas desengañadas.

¡Hasta el próximo capítulo!

Fabián Díaz Casado.01 de Febrero de 2010.
Escrito para el Foro de Municipalistas.